Ripple es un protocolo de pago global destinado a proporcionar transacciones rápidas y pagos baratos a nivel internacional. La red utiliza una moneda digital conocida como XRP (a veces se la conoce como Ripple). A diferencia de otras criptomonedas, Ripple no tiene como objetivo reemplazar a los bancos, sino que este proyecto se creó para mejorar el trabajo de los bancos (incluidas las transacciones entre diferentes bancos) a través de soluciones blockchain.
Ambrosus (AMB) es un token de utilidad basado en el protocolo Ethereum. A partir de ahora, está disponible en varios intercambios, incluido Binance. Este token funciona como combustible para el ecosistema Ambrosus.
Bitcoin Cash es el hard fork de Bitcoin más popular propuesto por Roger Ver en 2017 como una solución al problema de las transacciones lentas en la red de Bitcoin. La idea era crear una versión de Bitcoin que fuera mejor para los pagos, mientras que el Bitcoin original se considera más como una reserva de valor. Bitcoin Cash tiene un tamaño de bloque más grande que Bitcoin, por lo que las transacciones de esta moneda son más rápidas y baratas. Por otro lado, requiere más recursos para ejecutar el nodo completo de Bitcoin Cash, lo que lo hace más vulnerable a la centralización. Bitcoin Cash atrajo rápidamente a un gran número de seguidores y se convirtió en una parte destacada del mercado de criptomonedas. BCH está disponible en muchos intercambios y es compatible con numerosos servicios de cifrado. Desde el lanzamiento del proyecto, nunca ha salido del top 10.